¿Por qué mi hijo no deja el pañal?


La maduración afectiva y neurológica, juega el papel primordial de este sublime acto, que todo padre desea obtener.

El dejar el pañal no es una actividad obligada que muchos padres lo piensan así, y ni tampoco es una actividad mágica, es cumplir con una serie de requisitos, para que el niño mantenga la seguridad y se sienta preparado para hacerlo, para ello estamos en la obligación de apoyarlos en esta nueva etapa de vida, he aquí algunas recomendaciones:


Si tu hijo ya camina, es adecuado que los cambios de pañal ya no los realizas en la cama, sino parados, como si le cambiaras de calzon, asi denotara que es un niño grande y que está dejando de ser un bebé.

Relacionar el ambiente del baño como el lugar donde despedimos a un magnífico viaje al popo, y pipi, además podrás decorarlo con dibujos animados que sean de su agrado.

El aseo personal es otro papel primordial, es poder enseñarle a tu hijo que él tiene que cuidar de su cuerpo, e ir incrementando autonomía en la medida que el pueda irlo logrando.

Adquirir un inodoro que se encuentre a su medida, el mismo que será colocado junto al inodoro de adultos, es darle la importancia al caso.

Determinar horarios después de cada alimentación para dirigirse al inodoro y poder ejecutarlo en este lugar.

La vestimenta que utilice, debe ser cómoda, donde le permita por sí solo bajar su pantalón sin dificultad, para que ejecute la acción.

Estos consejos te ayudarán, a que tu bebé pronto deje el pañal y se adapte a una nueva forma de hacer pipi y popo.

Otro aspecto importante que se debe considerar, para la actitud que debe de tomar los padres es:

No debemos mencionar ningún tipo de groserías ni ofensas hacia el niño, ya que provocaremos que se sienta inseguro y temeroso por su poca habilidad ha realizarlo, no obligar a permanecer sentado por varios minutos en el inodoro, no generar malas caras o enfadarnos.

El dejar el pañal es uno de los logros más importante en el desarrollo infantil, si tu no lo llevas adecuadamente, podrías provocar grandes frustraciones y retroceder en su evolución, recuerda no exigir, dale el tiempo y la paciencia necesaria para generar el cambio.


Revisión bibliográfica:

http://www.pequefelicidad.com/2018/01/el-panal-se-deja-no-se-quita.html


Escrito por: Psicóloga Clínica Mónica Johana Reina Palma

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