RECOMENDACIONES NUTRICIONALES PARA LA MUJER LACTANTE
• Dividir la dieta en varias comidas que no sean muy abundantes, con el fin de no pasar demasiado tiempo en ayunas, mejorar las glucemias y controlar la sensación de hambre.
• Suficiente hidratación: no se debe bajar de dos litros de agua al día (ocho vasos). La ingesta de líquido en la proporción adecuada ayuda a mejorar el tránsito intestinal, previniendo la aparición de estreñimiento y hemorroides, reduce la retención de líquidos y la halitosis (aliento con mal olor), y disminuye la concentración de la orina, por lo que existe menos riesgo de desarrollar cálculos renales. Además, una correcta hidratación también favorece la salud de la piel y contribuye a reducir las posibilidades de que aparezcan estrías.
• Aporte de yodo: este mineral se halla en pescados y mariscos, por eso es recomendable tomar estos alimentos cuatro veces por semana. El pescado tiene unas propiedades proteicas similares a la carne y mucha menor cantidad de grasa que, en todo caso, es grasa más beneficiosa. Si existe algún impedimento para tomarlo, usar sal yodada al cocinar y en los aliños.
• Moderar el consumo de sal: no añadir sal en la mesa, evitar alimentos en salazón, encurtidos, embutidos, comida oriental, sopas de sobre, precocinados, etc.
• Controlar el picoteo: de alimentos dulces o grasos. En caso de tener hambre entre horas, elegir lácteos desnatados, fruta, tostadas.
• Tener en cuenta que hay ciertos alimentos, como el ajo, la cebolla, las coles, los espárragos, etc que, en algunas mujeres, pueden dejar ciertos componentes volátiles o sápidos en la leche materna provocando rechazo por parte del bebé, al que le desagradan estos sabores.
• Comer despacio, masticando bien los alimentos. No es recomendable hacer la comida o la cena en menos de media hora.
• No fumar ni beber alcohol.
• Tomar el sol de forma moderada y con protección con el fin de favorecer la producción de vitamina D.
• En caso de que exista flatulencias (gases), evitar verduras flatulentas (alcachofas, coles, brócoli, coliflor, lechuga, rábanos), legumbres. Para mejorar el problema es conveniente ponerlas a remojo, romper la cocción y tomarlas en puré. También ayuda añadir comino a la cocción o tomar una infusión digestiva al final de la comida.
Lic. Thalía Phuma
Nutricionista
Fuente: Ruiz, A. (2017) "RECOMENDACIONES NUTRICIONALES PARA LA MUJER LACTANTE".
Escrito por: Nutricionista Thalía Phuma Ludeña