HIPERCOLESTEROLEMIA (COLESTEROL ALTO)
DEFINICIÓN:
Se consideran hipercolesterolemia los valores de colesterol y LDL-c por encima del valor normal para la edad y el sexo.
Actualmente, la orientación diagnóstica se basa en la interpretación del perfil lipídico junto con la valoración del componente genético y familiar de la entidad.Así, las hiperlipemias primarias pueden ser: monogénicas, producidas por la alteración de un solo gen responsable del metabolismo lipídico, o poligénicas, si están producidas por la suma de los efectos de diferentes genes.
DIAGNOSTICO:
El protocolo varía en función de la razón por la que se ha solicitado el screening:
• Se pedirá un colesterol total como análisis inicial si el cribado se ha realizado porque uno de los padres presenta un colesterol >240 mg/dl.
• Se pedirá lipoproteínas: LDL-c y HDL-c como análisis inicial si el cribado se ha solicitado por historia familiar prematura de Enfermedad Cerebro Vascular.
TRATAMIENTO:
En función de los valores de colesterol que el individuo registre y antes de controlarlo con medicación, es preciso cambiar ciertos hábitos de vida para reducir los valores de «colesterol malo» que se deposita en las paredes de las arterias formando placas y favoreciendo la aparición de enfermedades cardíacas y aumentar los valores de «colesterol bueno» que elimina el colesterol del torrente sanguíneo y lo devuelve al hígado para ser eliminado. En los alimentos hay tres tipos de grasas:
Grasas saturadas: perjudiciales para el organismo, se encuentran en la bollería industrial, manteca de cerdo, piel de pollo, comida basura, aceite de coco, etc.
Grasas poliinsaturadas: constituidas por ácidos grasos omega-3 y omega-6. Tienen propiedades protectoras y se encuentran en el aceite de girasol, maíz y soja, margarina, nueces, almendras y pescado azul.
Grasas monoinsaturadas: son las que más protegen el corazón y se encuentran, sobre todo, en el aceite de oliva.
Para controlar los valores de colesterol conviene seguir los siguientes consejos:
• Modificar la alimentación
• Reducir el consumo de alimentos que contienen colesterol.
• Eliminar las grasas saturadas.
• Aumentar el consumo de fibra.
• Aumentar el consumo de frutas y verduras.
• Evitar los fritos cocinando a la plancha, horno o vapor.
• Beber agua en abundancia y evitar las bebidas alcohólicas.
Evitar el sobrepeso
• Practicar ejercicio: ayuda a eliminar la grasa del organismo
• Reducir el estrés: un alto nivel de estrés se relaciona con un aumento del colesterol.
El tratamiento con farmacoterapia, es necesario ser evaluada luego de presentación de exámenes médicos.
Resumen realizado por:
Liseth Hernández
Médico General
Fuente:
Cortés Rico O. Hipercolesterolemia. Prevención y actualización del diagnóstico, tratamiento y seguimiento en Atención Primaria. En:AEPap ed. Curso de Actualización Pediatría 2005. Madrid: Exlibris Ediciones; 2005. p. 49-65.
Diagnóstico y tratamiento de Dislipidemia (hipercolesterolemia) en el adulto. Guía de Práctica Clínica. Ciudad de México: Instituto Mexicano del Seguro Social; 2016. Disponible en: http://www.cenetec.salud.gob.mx/contenidos/gpc/catalogoMaestroGPC.html